Muchos de nosotros crecimos viendo como en las noches, un miembro de nuestra familia dormía con un vaso de agua en el velador, al lado de su cama, en el cual depositaba una dentadura al acostarse...
Muchos de nosotros crecimos viendo como en las noches, un miembro de nuestra familia dormía con un vaso de agua en el velador, al lado de su cama, en el cual depositaba una dentadura al acostarse; este hecho quizás no lo vimos muy a menudo, solo cuando nos quedábamos despiertos hasta tarde, pues la persona que lo hacía procuraba hacerlo sin que lo vean, cuando todos dormían.
El edentulismo, o falta de piezas dentales, es una realidad en un altísimo porcentaje de la población, y obviamente la incidencia es mayor conforme la edad avanza. La odontología de ayer, reemplazaba esta falta de dientes con prótesis dentales, que, dependiendo de la cantidad de piezas reemplazadas, podían ser fijas o removibles. A mayor número de piezas, se dificulta más hacerlo con prótesis fijas, así que la única opción eran las prótesis removibles, es decir los dientes que alguna vez vimos durmiendo en un vaso.
A pesar que estas prótesis dentales removibles, que pueden ser parciales o totales (estas últimas cuando faltan todos los dientes), devuelven la posibilidad de sonreír con cierta estética, tiene serias desventajas que probablemente su ser querido nunca le ha comentado:
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Comodidad y ajuste: A pesar que el odontólogo y el técnico dental se esfuerzan por hacer que la prótesis se adapte perfectamente a la encía, ésta última, al ya no contener las raíces dentales, se va deprimiendo poco a poco en lo que se conoce como pérdida ósea, en otras palabras el hueso que está debajo de la encía se va adelgazando haciendo que la prótesis pierda el ajuste, lo que produce que en ocasiones se suelte, hecho que es bochornoso para la persona.
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Irritación: Suele aparecer desde el principio, y se acentúa con la fricción que produce la fuerza ejercida por la masticación. Adicionalmente los alimentos atorados entre la prótesis y la encía producen irritación y ulceraciones que pueden llegar a ser muy dolorosas.
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Dificultad para masticar: existe dificultad para masticar determinados alimentos, aquellos que son muy sólidos, duros, crujientes o pegajosos. Al masticar este tipo de alimentos es probable que le cause dolor a la persona y la dentadura postiza se mueva hacia afuera. La persona que usa prótesis removible se ve obligada a cambiar sus hábitos alimenticios y dejar de disfrutar los alimentos que le gustan. Por ejemplo, la carne a la parrilla, la imposibilidad de desgarrar hace que solo le quede cortar trozos muy pequeños, saborearlos y tragarlos enteros.
Hemos mencionado solo algunas desventajas que tienen que ver con la funcionalidad del aparato masticatorio, sin embargo hay otras que tienen que ver más con la estética y la autoestima, los paladares de acrílico, los ganchos metálicos, etc. hacen que la persona que usa prótesis dental removible vea seriamente afectada su autoestima y su vida social. El hecho de no poder hacer lo que más nos gusta como solíamos hacerlo, cosas tan cotidianas e importantes como comer, besar, reír, cantar, etc. afecta la calidad de vida y el estado emocional de las personas, que viven resignadas a prescindir de ellas.
Afortunadamente, la odontología de hoy puede revertir todas las desventajas de las prótesis removibles mediante los implantes dentales, que serán materia de nuestro próximo artículo.